el ángel de la muerte

Ya hemos escrito en alguna ocasión sobre la muerte, aunque este párrafo de Michael A. Singer nos ayuda a ver con claridad:

Digamos que estás viviendo la vida sin pensar en la muerte, y el Ángel de la Muerte viene a ti y te dice:

-Vamos, ya es hora de irse.

-¿Cómo que es hora de irse? -replicas tú-. Se supone que tienes que darme un aviso para poder decidir lo que quiero hacer con mi última semana de vida. Se supone que tengo una semana más.

¿Sabes que te diría la muerte?
      -¡Vaya! Te he dado cincuenta y dos semanas enteras en este último año. Sin contar todas las demás semanas anteriores. ¿Para qué necesitas una semana más? ¿Qué has hecho con todas las demás?
Si te preguntaran eso, ¿cómo responderías? ¿Dirías acaso: «¡Caray! No estaba prestando atención, creía que no importaba.»

La muerte es la gran maestra. Pero ¿quién vive con ese nivel de conciencia? No importa la edad que tengas, puedes dejar de respirar en cualquier momento. Ocurre continuamente -a los bebés, a los adolescentes, a la gente de mediana edad-, no sólo a los mayores. Una respiración y se han ido.

Entonces, ¿por qué no reflexionas sobre cómo pasarías la última semana? ¿Qué pasaría si pudieras vivir con esa intensidad todas las semanas de tu vida? ¿Qué pasaría si supieras que la próxima persona que vas a ver será la última?

El verdadero buscador se compromete a vivir de esta manera cada momento de su vida y no permite que nada lo detenga.

.

.

Esta entrada fue publicada en psicología, zen meditación y etiquetada , , , . Guarda el enlace permanente.